LAS REBAJAS

Estamos en temporada de rebajas, los comercios hacen los mayores descuentos del año y es el momento de comprar aquello que nos apetecía, pero decidimos esperas para obtenerlo a mejor precio.
En general, las navidades han sido malas para el comercio, como para todos. En los escaparates de muchas tiendas podíamos ver descuentos y ofertas que en Navidad de cualquier otro año serían impensables, oficialmente no eran rebajas, pues legalmente no se pueden llamar así, pero había que arriesgarse y trabajar al límite de la ley (una de tantas absurdas leyes contra el comercio, por otro lado). Aún así, la gente no se anima a comprar.
La mentalidad debe cambiar, y hacerlo cuanto antes. económicamente estamos volviendo a años anteriores y la era del consumismo desenfrenado y las compras compulsivas ha terminado, al menos en temporada fuera de rebajas.
A partir de ahora, las personas van a comprar artículos por necesidad, es el nuevo mercado de supervivencia. Me compraré unos zapatos cuando los necesite, y que sean buenos y duren el máximo posible. No porque en un escaparate vea calzado al 50% voy a entrar si no es necesario.
Exactamente como no hace tanto tiempo.
En España ya hay muchas personas en situación de necesidad, no hablo de pasar hambre y frío, que también, si no de esas necesidades que en los últimos años nos hemos ido creando.
¿Recordáis ir al cine, como mucho, una vez al año en Navidad?
¿Comer o cenar fuera sólo en ocasiones muy muy excepcionales?
¿Las vacaciones en casa de los abuelos en el pueblo?

La nueva situación nos va a obligar a adaptarnos a los viejos (que no anticuados) conceptos de ahorro, gasto y  modo de vida. Es triste que la sociedad de bienestar no sólo no avance, si no que retroceda. Al menos servirá para valorar otras cosas más importantes, cosas importantes y gratis: La familia, los amigos, los paseos, el sol, el campo, un abrazo, la playa.....